Demian
- Alejandro Domínguez
- 23 ago 2020
- 4 Min. de lectura
La marca de Caín estaba en él. No, no temas, a menos de que no tengas la marca tú. Sí, entonces teme, no por el, sino por el fin del Mundo y la llegada del destino.
Sobre el libro
Demian fue publicado en 1919 por Hermann Hesse. Se rodea de simbolismos y una narrativa casi ensayista para describir el nacimiento de un humano. Esto, claro, de forma metafórica.
El cuento nos cuenta sobre la niñez y la juventud de Emil Sinclair quien es un niño de una familia moderadamente adinerada y quien empieza en el mundo de lo luminoso. Después, aun en su niñez, se ve involucrado en una serie de mentiras que lo acercan cada vez más al lado obscuro y vil. Sabía que su vida hubiera sido guiada por la moral más baja y el mundo obscuro hasta que un día conoció a Max Demian.
¿Qué hacía tan especial a Max Demian?
Temas más interesantes
Demian corre por un curso muy interesante de ideas. Todas se desarrollan a partir del descubrimiento personal, aun cuando se pueden identificar como ideas específicas e independientes. En esta entrada hablaré de la religión que se propone en el libre, el poder de la voluntad y lo que en el libro se entiende como la marca de Caín.
Empezando por la religión propuesta hablemos de Abraxas. ¿Quién o qué es este dios? Abraxas lo es todo. Y cuando digo todo me refiero a todo. Abraxas encarna lo bueno y lo malo en este mundo como uno solo. Todo lo luminoso y lo obscuro tiene un común y este es Abraxas. Es esta reunión lo que se nos presenta en Demian. No se trata de vender la idea de Abraxas como una verdad absoluta, sino como una forma de llamar a lo que vemos; el mundo se compone de bien y mal y viven en armonía. Así se percibe a todos y todo bajo esta "religión". Ninguna de estas partes es desperciable ni alabable sobre la otra.
¿Cómo surge esto? Bien, Pistorius, guía de Sinclair por un tiempo, cuenta cómo el único fin del humano debería ser hallarse a si mismo. Su único destino es ser quien tenga que ser como persona; todo lo demás viene a parte. Y una parte importante de esto es que no importa el resultado ético. No importa si te conviertes en una persona desagradable o muy carismática, lo que importa es ser quienes somos. Aquí es donde alabar a Abraxas y el destino toma prioridad ya que es el dios a quien eligen para representar la unión y la existencia tal como es y sin moral.
Como pieza fundamental de esta búsqueda de nosotros mismos está la voluntad. La voluntad como herramienta para hacer lo que tenga que ser necesario para seguir y alcanzar nuestro destino. En el libro esta voluntad toma formas que parecerían místicas o, incluso, mágicas. Por ejemplo, con nuestra voluntad podríamos ser capaces de llegar con quien quisiéramos o hacer que llegue a nosotros. Yo sé, suena poco creíble.
Aun así, la explicación es bastante lógica. Empezamos con la idea de que la voluntad no es realmente algo que nosotros elijamos, sin que deje de ser nuestra. Dado que cada acción debe tener una causa, incluso nuestras decisiones son consecuencias de algo externo. Fuera de esto podemos decir que es nuestra y cuando tenemos como voluntad un objetivo claro inconsciente y conscientemente tomamos todas las oportunidades para llegar a cumplir esa voluntad. El destino en Demian se forma de nuestra voluntad y también de las interacciones humanas. Es una aproximación que nos propone como centro y como medio. Es realmente interesante contemplarla y eso se los dejo de tarea.
Una de las principales críticas del libro es a la sociedad que vive tan apartada de sus necesidades fundamentales, de su destino y que dejan a un lado su voluntad. De esta idea surge la marca de Caín. Recuperada de un fragmento bíblico la marca del hombre quien es temido por todos por haber sido superior a Abel. Es la marca del humano con voluntad. Porque aquel que está decidido a hacer lo que su destino le indique sin dudarlo es imparable. En el libro se analiza con una mayor profundidad, pero en términos generales es esto. Y, claro, son aquellos con la marca de Caín quienes pueden ser ejemplo de la religión de Abraxas de la que hable anteriormente.
¿Portas tú la marca de Caín?
Lo bueno, lo malo y lo diferente
Lo bueno: la historia se enlaza de formas inesperadas y lleva al lector poco a poco por el camino de Sinclair; no se juzga directamente a ninguna creencia, pero sí se muestra una propuesta firme; todo en el libro tiene relevancia y casi todo puede ser un punto de inicio para desatar ideas y preguntas.
Lo malo: hacia el final el libro pierde su enfoque central; aunque se habla claramente desde la perspectiva de alguien mayor se introducen argumentos y pensamientos que no coinciden con la edad del personaje en el momento de vivirlas aun cuando se da la idea de que así fueron originadas.
Lo diferente: se da origen a una forma de ver el mundo bastante particular y se justifica adecuadamente; los simbolismos son claros sin perder relevancia.
¿Qué lo hace un gran libro?
La propuesta es muy original.
La trama es compleja, pero digerible.
Está lleno de simbolismos fáciles de entender e interesantes.
Cada argumento es justificado claramente.
Cada detalle es importante
¿Qué piensas de la propuesta de Abraxas? ¿Crees en la existencia del destino como se presenta en el texto? ¿Consideras que tienes la marca de Caín?
En fin. Esto ha sido todo por ahora.
¿Cómo te ha parecido este libro? Escríbeme en los comentarios.
Gracias por leer esta breve entrada. Ojalá te haya gustado.
Espero vuelvas pronto.
Creo que la parte de seguir lo que tú destino te indique es en parte cierta, aunque no creo que existe una cosa llamada destino como tal.
La parte de la voluntad, creo firmemente en que la mayoría ceden su voluntad por la servidumbre voluntaria. Todos prefieren que alguien más decida y tenga la culpa.
Que esto me lleva a decir que por eso no me agrada el destino, se vuelve también otra herramienta para echarle la culpa y te vuelves esclavo de él también.